miércoles, 20 de abril de 2011

BLASFEMAR


"...aunque blasfemar no fuera cosa de descreídos sino de creyentes contrariados, de cristianos viejos y deslenguados. Para blasfemar de verdad hay que creer en el dios al que se ofende y desafiarle. Una blasfemia atea no tiene sentido ni fuelle y se desactiva según sale de los labios.".
("SANTOS Y PECADORES", artículo de MONCHO ALPUENTE, hoy en "EL PAÍS")


6 comentarios:

  1. Cierto. Una blasfemia suena muy mal pero si no te la crees pues solo será una manera de manifestar diversas cosas, generlamente no demasiado gratas. Una blasfemia dicha por un no creyente solo afectará a los que creen, si la oyen.

    Saludos

    ResponderEliminar
  2. Se pueden dar muchos casos de blasfemia, también como provocación al creyente, pero el auténtico es este, el dirigido a tu mismo Dios.

    Un saludo, Dissortat.

    ResponderEliminar
  3. Una verdad como una casa. No hay blasfemia si no hay intención en el insulto. Así que si eres agnóstico no hay nada de nada. Todo se reduce a una mera palabrota malsonante. Tampoco si el creyente no tiene intencionalidad de ofender.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  4. <la blasfemia es producto de la ira y la ignorancia, es hija del rencor y de los pensamientos apresurados, de los arrebatos.
    Lo bueno serìa que aquel que cae en la cuenta de lo dico pueda pedir disculpas a tiempo.

    saludos desde la Argentina, gracias por tu reflexiòn, muy buen blog.

    Buen fin de semana.

    ResponderEliminar
  5. Gracias a ti, VACACIONES EN ROMA, buena reflexión la tuya.
    Saludos.

    ResponderEliminar